Historia de la Cultura Lambayeque


Hubo una vez un gran rey llamado Naylamp o Naymlap que llegó por mar, en medio de una gran flota de balsas y acompañado de una lujosa corte de funcionarios, versados ​​en diferentes artes y oficios. El rey trajo un ídolo de piedra verde llamado “Yampallec” (del cual deriva el nombre Lambayeque), inaugurando un largo período de paz y prosperidad en la región.

Naylamp fundó una dinastía de varios soberanos; el último de sus descendientes, el rey Fempellec, cometió el error de trasladar el ídolo de Yampallec a otro lugar. Un demonio en forma de mujer se le apareció y lo tentó. Llegaron desgracias: lluvias, sequías, hambrunas. El castigo se completó cuando un poderoso tirano, Chimo Cápac o Chimú Cápac, llegó más tarde de los reinos del sur, que se apoderó de las ricas tierras de Lambayeque.


¿Traición a un culto religioso? ¿Castigo? ¿Invasión? Esta leyenda explicaría cómo una dinastía de reyes triunfadores dominaba la región basada en un culto religioso, y que finalmente la falta de atención en el gobierno por parte del último de ellos acabó con la dinastía, mientras que la ciudad fue conquistada por un tirano sureño. Se sabe que este tirano fue un rey chimú, que conquistó Lambayeque. Los sacerdotes desesperados habrían buscado explicaciones para su miseria. Por eso el mito termina sugiriendo una ofensa a los dioses y el consiguiente castigo que supieron dar.

Los trabajos arqueológicos realizados en la costa norte, principalmente en la zona de Lambayeque, son muy escasos, por lo que solo se conocieron las referencias dadas por los Cronistas; Francisco de Jerez (1537), Cieza de León (1547), Miguel Cabello de Balboa (1586) en su obra “Miscelánea Antártica”, el Sacerdote de Morrope y Pacora, Modesto Ruviñoz y Andrade. La tradición contenida en estos documentos constituye el objeto principal de la tradición lambayecana. Posteriormente, estos aportes llevaron a los investigadores a interesarse por el desarrollo cultural de Lambayeque.

Los primeros en abordar el problema fueron: Tello
(1937) quien realizó una breve visita para inspeccionar e inventariar las huacas y artefactos funerarios de oro saqueados en Pampa Grande, antes Brunning (1917-1922), el primer estudioso en hacer un estudio consciente y sistemático de la historia cultural de esta región, registrando en su monografía las impresiones de los sitios más importantes que visitó y fotografió durante su breve estadía. Kroeber (1930) su obra fue limitada, solo visitó el Purgatorio, Chotuna y Etén.


Julio+C+Tello+Lambayeque
Los primeros estudios de campo adecuados se deben a Wendell C. Bennett, quien durante los meses de abril y mayo de 1939 estuvo en la zona de Lambayecana y realizó algunas excavaciones en 81 tumbas y visitó otros 15 lugares no excavados, concluyó que esta parafernalia funeraria pertenecía a un más tarde, edad de transición. Richard Shaedel (1951-1966), es uno de los primeros en realizar un estudio a gran escala con bocetos cartográficos, por contar con fotografías de áreas, actualizó y recopiló las principales categorías de restos arqueológicos como canales, campos, pirámides y residenciales. lugares. Kosok (1965) reportó y mapeó 250 sitios en los valles de Motupe, La Leche y Lambayeque, su investigación se basó en la interpretación del desarrollo socio-económico y político y el riego a gran escala del Lambayeque.

Su base económico Estuvo vinculado a la construcción de grandes complejos hidráulicos, la mayoría de los cuales requirieron un gran despliegue de mano de obra. Construido para llevar agua a los campos ubicados en las laderas del río como La Leche y otros.

En la década de 1970, Lambayeque comenzó a recibir la debida atención y se desarrolló el Programa de Excavaciones a Gran Escala (1971-1976) en Pampa Grande, que ofreció un amplio conocimiento de la vida urbana prehistórica del lugar. Ya en 1978 se desarrolló el Proyecto Arqueológico “Batán Grande-La Leche”, que en la actualidad se conoce como el “Proyecto Arqueológico Sicán”, el cual fue dirigido por Izumi Shimada, aportando nuevos datos para un mejor conocimiento de la cultura en estudio.

Las antiguas culturas prehispánicas de la zona andina, mantienen una serie de historias y leyendas que muestran los posibles orígenes de estos pueblos, la leyenda de Naylamp, descrita por Cabello de Balboa, narra la mítica llegada de un gran personaje acompañado de un gran comitiva, que se asentó cerca del río Iaquisllampa donde construyó el templo de Chot. Naylamp tuvo un hijo de quien tuvo 12 descendientes que luego fueron sucedidos por 8 gobernantes más hasta que fueron conquistados por los incas.

En los últimos trabajos científicos desarrollados en la zona, se estima que los orígenes de la cultura Lambayeque se encuentran al final del Horizonte Medio o etapa en la que la cultura Moche y las tradiciones sincréticas colapsan y fusión estilística del dominio Cajamarca Medio en el Costa. North, debido a la intrusión de un nuevo concepto social, ideológico y estilístico llamado Wari.

Con el declive de la influencia Wari en el norte se produce el surgimiento de pequeños reinos y culturas regionales que se refleja en una nueva concepción ideológica social y económica reflejada en la cultura Lambayeque o Sicán. Los diferentes restos materiales encontrados se atribuyen desde hace muchos años a la Cultura Chimú. De tal manera que esta región fue “Chimuizado” por Tello en 1929, Kroeber en 1939; Denomina a la cerámica clásica como “Chimú Norte” y “Chimú Cursivo”.

Era Rafael Larco Hoyle fue el primero en utilizar clara y categóricamente la frase “Cultura Lambayeque” (1948), en su “Cronología Arqueológica del Norte del Perú”, señalando al mismo tiempo los elementos diagnósticos que a su juicio distinguían y aislaban la cerámica clásica. de la región a la que se refiere. Partiendo de los motivos escultóricos y tiradores puente, la deidad antropomórfica de ojos alados, y atribuye cierta anexión al estilo cajamarca, luego lo ubica dentro y como consecuencia del expansivo Tiahuanaco en la Costa.

Para Izumi Shimada, el nombre que debe llevar este conjunto de elementos culturales es el de Sicán, debido a un documento antiguo (Archivo general de los Indios, Sevilla / Justicia 418); Menciona que en el año 1536 esta zona se llamó “Sicani o Cani”.

En el encargo encomendado a F. Pizarro que entregó a Lobo en 1536, menciona que la zona principal se llamaba “Sicán”.

Shimada (1985) caracteriza cronológicamente esta cerámica en 3 períodos:

los Sicán antiguo / temprano (750 -900) caracterizado por la fuerte influencia de estilos foráneos como Cajamarca Medio y Wari / Pachacamac. Constituye una fase de transición entre el fin de los Moche o el surgimiento de Sicán.

los Sicán Medio (900 – 1,100) período en que Wari decae, la cerámica de este período con el símbolo del Señor Sicán, se ha encontrado desde Ancón y Pachacamac hasta la Isla de la Plata cerca de Guayaquil.

los Sicán tardío (1100 – 1375) la cerámica presenta un perfecto bruñido, negro oscuro y teñido de negro. En 1963; Según Lothrop es una publicación de 1964 y Engel de 1965, las expresiones de ambos estilos se debieron a que la mayoría de las cerámicas de Lambayeque son negras como la Chimú y a la falta de estudios importantes sobre el valle de Lambayeque. (La zona fue conquistada y anexionada a la cultura Chimú).

Lo más destacable es la producción metalúrgica a gran escala de todo tipo de objetos metálicos, su uso fue masivo, cubriendo incluso por completo cerámicas y cámaras funerarias con láminas de tumbaga (aleación de cobre, plata y oro), entre ellos se destacan elementos elaborados con Cobre arsénico (bronce).

En cuanto al poder económico, se basó en una alta productividad agrícola e incluso un amplio control del sistema de riego artificial. Al mismo tiempo, tenían el control en una amplia red de intercambio de objetos de diferentes partes de América del Sur.

Su organización ideológica estaba bien definida y tenían como deidad principal presente en sus representaciones materiales así como los rasgos de ave que las mantienen.

Shimada menciona según sus investigadores, principalmente los que se refieren a la arquitectura monumental son:

Construcciones de grandes pirámides truncadas, combinadas con plataformas generalmente en forma de “T”, modelo en el caso de Huaca del Loro. La construcción en esta arquitectura monumental utilizó cámaras de adobe rellenas de escombros sueltos, troncos de algarrobos y grandes tejas cocidas, donde estas últimas debieron ser utilizadas como refuerzo estructural de las cámaras.

El uso de grandes pilares distribuidos en cajas cuadradas de adobe para el subsuelo, como ejemplo tenemos a Huaca El Corte donde encontró 48 columnas cuadradas pintadas y alineadas en 12 filas de 4 columnas cada una, las bases de estas columnas se dispusieron en forma cuadrada. , y colocados en cajas de adobe con piedras y / o escombros rellenos de arena, posiblemente esta área no podría cumplir con las funciones de vivienda; pero si se utilizan como escenarios para la exhibición de sus ritos públicos.

Una importante tradición en la arquitectura monumental de la Sicán- MedioFue el uso de adobe marcado intencionalmente, estas marcas geométricas que se hacían con los dedos antes de que el adobe tomara consistencia. El 90% de todos los adobes del mismo tamaño, color, textura y forma con diferentes marcas se repitieron en adobes de diferentes tamaños, formas, colores y texturas. Se admite que los adobes marcados fueron fabricados por varias adoberas, (bajo contrato) y para diferentes patrocinadores, y los adobes sin marcas fueron fabricados para cumplir con una tarea tributaria del estado. Los adobes marcados fueron colocados en las construcciones por diferentes grupos de trabajadores (no pertenecientes a los productores de adobe) quienes utilizaron diferentes adobes marcados que en un principio apilaron de manera desordenada.

Los recintos de élite mostraban detalles de varias habitaciones interconectadas, que presumiblemente incluían residencias de élite y algunos talleres artesanales.

Un ejemplo de decoración mural con un diseño de 6,70 m. de largo por 1,02 m. de altura, donde 6 personajes portan un alto y suntuoso tocador sobre una corona con contornos escalonados, destacando el ojo alado en las máscaras. Los colores utilizados correspondieron al rojo oscuro, blanco, naranja ocre, rosa, marrón para la decoración de paredes, pero con relieves policromados, son los encontrados recientemente en Túcume.

Estudios sobre cerámica Aún no han podido establecer una secuencia aceptable hasta la fecha, solo se limitó especialmente a su fase media. Las características más destacadas que destacan a esta cerámica es el color negro; cuerpo esférico que descansa sobre una base de pedestal; con pico cónico, en el que se mueve estilizada la cabeza de un personaje de ojos alados (Naylamp); En el sector occidental de la cabeza de Naylamp nace un asa conectada al cuerpo del contenedor. A menudo este personaje va acompañado de dos sujetos secundarios, tendidos y tumbados boca abajo como adorando a él, se conoce esta forma de cerámica.

1632878215 764 Cultura+Lambayeque+ceramica
Zevallos (1971) propone la cerámica como una creación de patrones propios de los habitantes de este valle, diferenciándolo de otras culturas regionales, y que se deriva de la cultura Mochica por realismo. Para las cerámicas utilitarias, Walter Alva las distingue por su singular técnica de paletizado con varios motivos impresos en una distribución territorial específica.